Ambientación general

Casi han pasado 50 años desde que la raza humana encontró a otra civilización de vida inteligente en el universo y dado un salto gigantesco en su desarrollo tecnológico gracias al descubrimiento de El Gigante Dormido que permitió estudiar los agujeros negros y aprovechar sus propiedades para realizar saltos espaciales a diversos puntos del universo desconocido. Tras un largo periodo de constante batalla contra los Kavroks, donde se perdieron muchas vidas entre ambas especies, la humanidad, con la intervención de una tercera raza, los Teahes, resolvió llegar a un tratado de paz y colaboración entre especies y además, habiendo ampliado su visión del universo y del papel a jugar por la raza humana, el planeta tierra entero se ha unificado, como centro de gobierno y desarrollo cultural de la raza humana ante otras especies, convirtiéndose así en la capital y hogar de los humanos. Se ha establecido un gobierno central a nivel global, así como fueron unificadas las fuerzas militares y de producción.

Los Teahes son una especie bastante avanzada, que aparecieron en el momento justo para evitar que la guerra terminara por causar pérdidas mayores entre Humanos y Kavroks. Aunque su actitud suele percibirse como pedante, son considerados bastante sabios y han tomado el rol de guías para el desarrollo de las otras especies y formar un vínculo de cooperación. Además, con miles de año de historia, los Teahes han expandido su dominio por los diversos rincones del espacio y son una fuerza de temer en un conflicto directo.

Por su parte, los Kavroks han demostrado ser honestos y respetuosos del pacto alcanzado y han sido aliados invaluables en el co-desarrollo de tecnologías entre ambas especies. Sin haberse declarado ganadores en la guerra y debido a las similitudes evolutivas entre humanos y Kavroks, no fue complicado que ambas civilizaciones se consideraran como iguales, hermanos de lucha y compañeros en la creación de nuevas tecnologías que les permitieran continuar los descubrimientos mientras tenían la ambición de investigar cada rincón del universo, por complicada e imposible que pareciera la tarea.

Tanto los humanos como los Kavroks han dispersado sus colonias por diversos sistemas estelares, lo que ha permitido incrementar los números de su población así como conseguir recursos invaluables para el desarrollo de nuevas tecnologías. Cada raza respeta los territorios colonizados, aunque se han llegado a acuerdos de libre navegación siempre y cuando no representen una amenazada militar o de seguridad.

Dada la experiencia del primer contacto humano con otra especie, además de las reservas que conservan en el fondo sobre las intenciones de estas nuevas especies, tanto Humanos como Kavroks fortalecieron sus fuerzas de defensa ante la aparición de cualquier otra raza que pudiese representar algún tipo de amenaza. Dado el aumento de los agujeros negros estables en distintos puntos del universo conocido donde existían colonias Humanas, Teahes y Kavroks, no tardarían en generarse estos nuevos contactos.

Formarían así un Consejo Estelar, mediante el cual regirían sobre el territorio espacial conocido y colonizado por las tres razas que lo conformaban. Promoviendo el trabajo en conjunto, la creación de un gobierno unificado y fuerzas militares y de investigación cuya misión sería conservar y defender la paz en todos los sistemas estelares habitados, el Consejo se fortalecía para estar alerta ante cualquier contacto con otra raza inteligente que tuviese la tecnología para realizar viajes espaciales.

Los Verkes aparecerían en territorio del consejo de manera imprevista, siendo una raza bastante guerrero e impulsada por la violencia, pero al verse superados por tres razas unidas y con una fuerza militar considerable, optaron por la vía pacífica para evitar su propia destrucción. Pero debido a su naturaleza e historia manchada de sangre, los Verkes tardarían en adaptarse y ser aceptados en el consejo como iguales y muchos temían su posible traición en cualquier momento, pero en cuanto a los últimos años, la paz ha prevalecido.

Las razas del consejo estelar aprendían a convivir entre ellas en nuevas colonias y estaciones espaciales conjuntas, aprendiendo su idioma y cultura tras un par de décadas de acciones diplomáticas. La colaboración entre especies abría las puertas a nuevos descubrimientos, aunque seguía existiendo el temor de la llegada de una especie superior, con mayores capacidades militares y que pudiese sembrar el terror con un ataque directo y destructivo.

Esa tan temida raza aparecería tiempo después, siendo conocidos como los Uddort. Poco saben de ellos y apenas se han registrado algunos ataques aislados. Pero la desaparición de colonias enteras y los signos de destrucción en diversos planetas comienza a atraer la atención de las autoridades que han dado la orden de comenzar las investigaciones y prepararse para lo peor. Los Uddort podrían ser el peor enemigo al que se hayan enfrentado.

Así fue como los Humanos hicieron contacto con estas tres razas, Kavroks, Teahes y Verkes; y juntos se enfrentarían a un temible enemigo, los Uddort.